Uno de los tipos más frecuentes de encargo son las ilustraciones. ya sean para portadas, láminas, para vestir un sitio web o un retrato para regalar. Acá les dejo un pequeño paso a paso del proceso para una ilustración de seis personajes.
Lo primero que hago es tratar de llegar a la idea más clara de lo que tiene el cliente en la cabeza. Para esto no basta solo con la descripción de los personajes o la composición. Toda la información extra que se pueda tener ayuda: el tono que debe tener la ilustración, el carácter de cada personaje, su historia, etc. Todo sirve a la hora de imaginar las poses y actitudes.
Las imágenes de referencia nunca son demasiadas.
Muchas veces las imagenes de referencia que me entregan de los personajes no son de cuerpo completo. Por eso antes de comenzar a bocetar la lámina en sí, me tomo un tiempo para hacer una hoja básica de personajes.
De este modo, se evita el incómodo momento donde el cliente te avisa que tal o cual personaje tiene rabo o una pata de palo. Todas las correcciones que se hagan sobre los bocetos son correcciones que evitamos hacer sobre la ilustración terminada.
Una vez aprobada la hoja de personajes llega la hora de ponerse a pensar la ilustración final. En este caso, el encargo no incluía un fondo, por tanto, los personajes tienen que llenar la hoja.
Siempre dentro de mis habilidades limitadas, de acuerdo a las imágenes de referencia que me entregaron, puedo inclinar la estética general de la ilustración para donde creo va el gusto del cliente.
En este caso el diseño elegido fue el número 2. Pasé entonces a dibujar cada uno de los personajes en la posición indicada en el boceto. Todo en carpetas ordenadas dentro del archivo fuente, para finalmente armar la composición, unificar el color del grupo y listo el pollo.
